Una de las curiosidades de este libro es su organización, comienza con
una dedicatoria amplia y generosa, y luego del prólogo nos encontramos con una
reseña de la ciudad de La Plata y su fundador para finalmente, adentrarnos en
la investigación, no sin antes su correspondiente PRESENTACIÓN en donde
especifica la información que brindará, la cual decidimos citar porque
consideramos que quien mejor puede contar de qué trata el libro es el mismo
Girbal:
"En éste trabajo que he
titulado Los tranvías que yo he visto, en la Ciudad de La Plata, de los años
1932 a 1966, mencionaré también los antecedentes de tranvías anteriores.
Contemporáneamente a los
tranvías platenses, vi el Auto Riel (SMAR) que llegaba hasta Abasto y en la
Ciudad de Buenos Aires a numerosos tranvías que me sería difícil precisar.
Excepto el Imperial cerrado al servicio de la línea 1, que hizo el trayecto de
Primera junta a Lacarra y Rivadavia por ésta, y el tranvía 22, en su recorrido
de Retiro a Quilmes, de los que hablaremos más adelante.
Vi en La Plata al trolebús en
su vigencia completa de un poco más de
once años, que van del 4 de junio de 1955 al 31 de diciembre de 1966, fecha
esta en que también fueron retirados los tranvías.
En consecuencia la vivencia
más cercada que puedo tener del tranvía y del trolebús debe datar de por lo
menos cuarenta años.
He agregado fotografías,
dibujos y gráficos, conté para ello con la muy apreciable ayuda del Archivo
general de la Nación y de la Asociación Amigos del Tranvía de la Ciudad de
Buenos Aires.
En los años que compartí con
el tranvía en la ciudad de La Plata, debo haber viajado en todos y en cada uno
de los coches muchas veces. Hasta podría decirse que los conocí a todos “personalmente”
y que aún hoy de verlos nuevamente, los podría identificar.
Este escrito es una forma de
reverenciar el tranvía: recordándolo, comentándolo y transmitiendo sus
vivencias para que no se pierdan definitivamente con el tiempo".
(Libro Los tranvías que yo he visto, de Jorge Girbal, editorial Dunken, tercera edicion, pagina 11)
En su tercera edición incluir un toque literario con algunos poemas
sobre la ciudad y el tranvía y también añadir los comentarios de personas
reconocidas que leyeron sus ediciones anteriores.
Al final de sus páginas nos
encontramos con un mapa de cómo llegar a La Plata y el texto Lección de Optimismo del ilustre
fundador de la Universidad Nacional de La Plata.
El libro de Jorge Gírbal
participó con éxito en los años 2007, 2008. Y 2009 en la Feria Internacional
del Libro en Buenos Aires, cuando fue seleccionado y enviado a la Feria Internacional del Libro en Frankfurt,
Alemania, los días 14 al 18 de octubre de 2009, por la Editorial Dunken y la cámara
argentina del libro.
El trabajo de Girbal ha trascendido los
límites del país porque refleja nuestra historia y nuestra cultura. Como se
explica en el prólogo, “no es un libro para eruditos o historiadores” No hay
una gran lista de fechas y nombres pero sí imágenes guardadas en la memoria
que, como se verá se encuentran en el corazón del autor, él intenta pintar el
tranvía a quien no ha tenido la posibilidad de conocerlo, en pocas palabras, es
un libro que vale se leído y disfrutado por todos, por quienes vivieron en esas
épocas y también por las nuevas generaciones.
Fuente: “Los tranvías que yo he
visto” de Jorge Raúl Girbal, Editorial Dunken, tercera edición.
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